17 de mar. de 2017

OPINIÓN

En contra de "rentabilizar" a una enferma muerta


Reflexión

Beatriz Figueroa
Foto: Infogauda

  Beatriz Figueroa / Vigo

 No he querido hacer una nota de prensa desde que he tenido conocimiento de la muerte de Isabel Carragal el mismo lunes por respeto a su familia y a ella misma. Aún así me he visto obligada al envío de esta precipitada nota, y no por ello irreflexiva, por el reportaje publicado hoy en FARO DE VIGO, medio siempre comprometido con mi lucha y denuncia por la defensa de nuestros derechos como enfermos de cáncer.

 Ahora desgraciadamente todo puede esperar para Isabel, aunque seguiré luchando para que esto no vuelva a suceder. La muerte de Isabel me ha afectado mucho porque hacía tan solo una semana había compartido su injusta situación a los asistentes a una charla coloquio en la que participé en Marin y que llevaba por título, como una de mis campañas, "O cancro non é cor de rosa". Para ela é preto para sempre. Conocí a Isabel en septiembre del 2014. Se puso en contacto conmigo precisamente porque aún no recuperada el INSS le había denegado en aquella fecha la incapacidad y se veía obligada a sobrevivir con un subsidio miserable de 450,00€ teniendo a su cuidado a dos menores. 

 No me va a resultar fácil defender los derechos económicos, sociales y laborales de los enfermos porque  mi estado de salud se ha deteriorado mucho para seguir está titánica lucha, pero lo haré, si cabe, con más ahínco. Llevo algo más de un año en la unidad de dolor, he vuelto al quirófano por quinta vez en octubre y se me ha diagnosticado una nueva patología que puede estar provocado por el largo proceso oncológico.

 Durante el 2016 mis salidas de casa han sido prácticamente para citas médicas y gestiones administrativas, con escasa presencia pública y en medios de comunicación. Como bien sabéis no tengo un equipo, soy yo sola y no tengo medios ni humanos, ni materiales, ni económicos. Recientemente se me ha denegado la solicitud de la  incapacidad absoluta ante la imposibilidad de trabajar por las limitaciones de los efectos secundarios y secuelas de mi proceso de enfermedad. Y otro factor añadido.

 Tan solo hace quince días mi amigo Javier Blanco, de 43 años, fallecía en un hospital en Barcelona. Su esposa Ana fue la primera persona que me escribió en 2013 cuando conoció mi denuncia pública por mi huelga de hambre. Su pensión por incapacidad permanente absoluta la cobró por primera vez en noviembre después de largos años de reclamaciones ante el ICAM y tener que acudir a los tribunales. Nunca pudo disfrutarla puesto que entró en coma en noviembre cuando estaba hospitalizado y ya no salió con vida. 

 ¿A qué se dedica el Defensor del paciente, además de salir en la prensa? 
 Su actividad más conocida es buscar y facilitar clientes a los abogados colaboradores con objeto de que relicen reclamaciones generalmente patrimoniales por presuntas negligencias sanitarias. La publicidad la obtienen de forma gratuita comunicando a la prensa el inicio o indemnización de cada caso o remitiendo cartas a la fiscalía sobre diferentes problemas que, si bien no suelen servir para que haga nada, les permite salir en los medios de comunicación.
Espero los próximas días haceros llegar una nota de Prensa. Lo que puedo avanzaros es que la Ministra de Sanidad, Dolors Monstserrat, no ha dado respuesta a la carta que registré en su ministerio  el 2 de febrero porque no tenía ni 15 minutos para recibir a tres iniciativas ciudadanas en relación a inversión, financiación y protección económica del cáncer que representaban a 2 millones de ciudadanos. Tenía un compromiso con la Reina Letizia en un acto de la AECC. Ese mismo día me reuní con el Secretario de Estado del Ministerio de Sanidad, que tampoco me ha llamado a pesar de haberse comprometido a ello.

 Los diputados de los grupos políticos con representación parlamentaria en el Congreso con los que me reuní también el 2 de febrero en el Congreso se han comprometido a presentar una nueva proposición de ley.

 La Defensora del Pueblo sigue trabajando en el informe sobre las consecuencias sociales y económicas para los enfermos de cáncer al que le insté la primera vez que me reuní con ella.

 Ante las enfermedades graves, enfermos de primera y enfermos de segunda. la Ministra asistió a la entrega esta semana de la Gran Cruz de la Orden Civil de Alfonso X el Sabio a Francisco Luzón (ex banquero y afectado de ELA).

 Los enfermos de cáncer que carecemos de protección económica también somos víctimas de violencia: violencia económica que puede matarnos antes que el hambre. 

 La Xunta de Galicia anunció ayer que duplica este año el presupuesto destinado a dar ayudas mensuales para que las mujeres víctimas de violencia doméstica puedan contar con un soporte económico. Se trata de subvenciones que se conceden mensualmente durante un año y que oscilan entre los 300 y los 800 euros, en función de los ingresos o del número de hijos. Se destinarán en 2017 un total de cuatro millones de euros, el doble que en 2016. ¿Por qué no se adoptan medidas de este tipo que palien situaciones como las de Isabel? Ella no era la única, tuvo agallas para denunciar públicamente su desprotección. ¿Y quienes están en silencio? No son carnaza para buitres como el "defensor" del paciente. No interesan como me dijo en reciente conversación telefónica Carmen Flores, Presidenta de Defensor del Paciente.

Salud!

Ningún comentario:

Publicar un comentario