ÉXITO DO CONCERTO DE LEONARD COHEN, COPATROCINADO POLA DEPUTACIÓN

Leonard Cohen, el arte puro gana en el directo. El cantautor canadiense emocionó a más de 4.000 seguidores en el palacio de deportes Paco Paz de Ourense.
En diecinueve metros de escenario, un equipo de sonido, coros y músicos de lujo acompañaron ayer a Leonard Cohen en el concierto que ofreció en Ourense dentro de la gira del Xacobeo. En cuanto el cantante, cuya música definen sus detractores como "el depresivo no químico más potente del mundo", arrancó desde el escenario con su "Dance me to the end of love". El público ya era sinfonía de aplausos desbordados y sobraba toda escenografía.
Leonard Cohen (Montreal 21 de septiembre de 1934), a punto de cumplir los 76 años, demostró ayer que su música, o mejor aún sus poesías sonoras, depresivas para unos, radiografías del alma humana para otros, no caducan. Un público heterogéneo, en el que había de todo menos coetáneos del cantautor, pero unidos por su adicción al universo Cohen, pagó religiosamente y con antelación sus entradas, agotadas días antes del concierto, para seguirle ayer con devoción, silabeando sus letras y aplaudiéndolo solo con oír el primer acorde de cada tema.
Mientras, un sorprendente Leonard Cohen, más alejado de aquellas tortuosa imagen existencialista que le hizo célebre, sorprendía con gestos y saltos cómplices con sus músicos y guiños hacia las tres impecables voces femeninas de su coro.
Dicen que en 2008 Leonard Cohen volvió a los escenarios para recuperarse del sablazo económico que le propinó una ex amante y ex asesora financiera. Pero ayer don Leonardo, dejó claro que lo suyo no es cuestión de dinero el autor material de ese ejemplo de sincretismo vital que es "Live in London", amante de "Suzanne" y "Dear Heather", está más vivo que nunca y busca el contacto con el público.
Y entre ese público de todas las edades, pero mayoritariamente joven (de hecho tal vez el único espectador septuagenario era el presidente de la Diputación, José Luis Baltar), mucho político también. El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo; conselleiros como el de Educación, Jesús Vázquez, y el de Cultura, Roberto Varela;la delegada de la Xunta en Lugo, Raquel Arias; o el vicepresidente del Parlamento de Galicia, Manuel Baltar.
Con un sombrero, que lucían también el resto de sus músicos, Cohen fue nuevamente el más votado cuarenta años después por la única fuerza de su arte.
Fuente: Faro de Vigo
Ningún comentario:
Publicar un comentario