OPINIÓN

 INDIGNACIÓN           

Ese señor no es nada mío 

Manuel Vázquez de la Cruz   

 Nací dentro del territorio de un país que colonizó a golpe de horrores a muchos pueblos. Después creó un nombre para los que los criticaron por sus actuaciones, asesinatos, violaciones y les dijo que lo que escribían era leyenda negra. Pero es muy negra la historia y no es leyenda.  

 Stephan Zweig explica como de todos los rincones de un reino de Castilla salieron las personas mas malvadas cuando un día oyeron hablar de oro en un mundo que no conocían y lo hicieron de uno en uno, pero en tropel, en su búsqueda de hacerse ricos como fuera.  

 Sus reyes, a los que un papa despiadado, envenenador de adversarios, incestuoso y con toda la maldad encima, les dio el título de católicos. Se sentían felices ante tanto oro y tantos hombres y mujeres, que harían cristianos a la fuerza.   

 Después si hacía falta tenían la santa Inquisición y el fuego para quemarlos.    

 La fuerza por encima siempre de la razón. La riqueza y el oro servían para hacer guerra tras guerra para extender sus dominios. Así sucedió. No hay dominios pero el espíritu queda y la falsedad se hizo historia.   

 Pero, ante tanto oro, y por sí acaso, la reina católica, dijo y exigió, que se cumpliera lo de “un mundo descubrió Colón para el reino de Castilla”. No fuera a suceder, como de hecho sucedió por poco tiempo, que la Confederación Aragonesa de Reinos, dejara de ser, a su muerte, de los dominios de sus descendientes.  

 Después, mucho más tarde, le llamaron Hispano-América. Nunca dicen que cuando anduvieron por allí cristianizando, matando y torturando, España aún no había nacido.  

 Mas  tarde el que dicen nuestro país tuvo colonias en África y su actuación en los países sometidos fue también, como todos los de regímenes coloniales, igual de maligna y cruel.

 Eso sí les llamaron provincias españolas, cuando el mayor asesino de compatriotas que ha habido en el mundo fue caudillo por la gracia de Dios. Era muy hipócrita todo, quizás lo sigue siendo. Quizás el régimen del 78 es solo continuación. La monarquía, por lo menos, es seguro que queda.    

 Pero los individuos colonizadores les gritaban muchas veces a los colonizados, ¡Viva España y sus provincias! Insultantes y radiantes. Eran los jefes allí, aunque a lo mejor aquí fueran simplemente como usted que me lee o como yo.   

 Casi todos los colonizadores cuando se fueron dejaron a los países colonizados en la más absoluta miseria. En África además se preocuparon de crear fracciones que siguieran en guerra. Ellos apoyaron a los suyos. A los Tomsbe, que no sé si escribe así pero como fueron muchos..., así vale para todos.  

 Las colonizaciones sólo se ejercieron robando recursos y no enseñando nada, porque de hacerlo se tendrían que marchar antes. Para el después tenían el neocolonialismo y cuando creyeron que había alguno entre los nativos que podría impedirlo lo mataron como hicieron con Lumumba, en el Congo, que fue donde quizás se cometieron las mayores atrocidades. El colonialismo sin atrocidad no existe ni existió.   

 Los españoles no fueron menos y cuando no pudieron hacerlo entregaron a los colonizados a tiranos amigos como Hassan II. Y los de aquella provincia, con carnet de identidad español, viven, expulsados de su territorio, en campamentos de miseria pero con mucha más dignidad que los gobiernos de la potencia colonizadora. Los que hipócritamente les decían que eran parte de España, que ellos definían entonces como una unidad de destino en lo universal. Hoy Reino de España y dicen que democracia.  

 Una democracia donde el jefe de la oposición y sus fieles servidores de mente colonizada-colonizadora por la maldad, “exigen” que salga la Armada a defender a España de unas embarcaciones de madera en las que viajan contra viento y marea, personas de otra raza, niños (algunos recién nacidos), gentes que huyen o buscan trabajo y un poco de humanidad, en un mundo que antes los oprimió, vejó y robó. Pero los pueblos de ese mundo replegados en sus “confores” parece que han perdido el sentido de clase y quizás votan a favor de quién los explota, que es el mismo que persiguió a los ascendientes de los que vienen en patera para hacerlos esclavos y los colonizó en sus lugares de origen llegando a cortarles las manos si no recogían la cantidad de caucho marcado al iniciar el trabajo. Desde antes de nacer el sol hasta después de ocultarse.   

 La civilización es la occidental, si no que se lo pregunten a Julian Assange. Él y miles la sufrieron.  

 Supongo que si quieren mandar la Armada será para hundir a cañonazos sus “barquitos de papel”. Supongo que los bien nacidos de este país saldremos a la calle gritando no.  

 Alguien me dijo el otro día que los políticos son todos unos delincuentes. Me acordé de Herrero de Miñón, de Tierno Galván, de Anguita, de muchos de izquierda o derecha, que más dará para ser buenas personas... Pero el señor que quiere mandar la Armada contra cayucos con personas, es mucho peor que un delincuente común. Es un hombre horror. Es  muy parecido al Herodes de la Biblia. 

 Me encanta decir que no tiene nada que ver conmigo. Solo siento por este caudillo desprecio. Ni siquiera es mi adversario político. Es simplemente el vestigio de los  dichos del pasado: una unidad de destino en lo universal. ser español es lo mas serio que se puede ser en la vida, Santiago y cierra España... Se pondría poner letra a la vieja canción y cantar:  

 Abascal y Feijóo, el espíritu impera...

 Ambos no se dan cuenta que lo que piden es una vergüenza. El señor Feijóo es justo lo que dice de sus adversarios políticos, que para él son enemigos. Y cuando las cosas llegan a este punto la democracia camina hacia el abismo. Abascal es el abismo. 

 Lo sabrá y querrá ir por ese camino...