14 de ago. de 2017

PATRIMONIO

Fuerte de San Lorenzo de Goián, algunas patologías



ENCUENTROS  POLIORCÉTICOS

 La última actuación oficial sobre la Fortaleza de San Lorenzo de Goián ha tenido lugar con ocasión de las subvenciones para la Rehabilitación del Patrimonio histórico-cultural dirigidas a los municipios de la provincia de Pontevedra (2016), con la denominación de Conservación y Mantenimiento de la Fortaleza de O Couto-Goián, un presupuesto de 10.179,97 euros, estando a cargo de la empresa “Excavaciones y Desbroces Rocha, S.L.” 



 Semanas antes, Encontros Poliorcéticos hizo un reconocimiento somero de las patologías que aparecían ante nosotros y que merecerían ser noticiadas dentro de un contexto periodístico digital. Obviamente, un estudio profundo de aquellas es cometido de grupos de trabajo multidisciplinar y preventivo. Lo cierto es que asomaban hace ya mucho tiempo muestras de poco cuidado o de abandono. Por ejemplo, un sillar curvo de cuerpo de garita en el baluarte de Santiago, entre cara y flanco, que acabó a ras de suelo. 



 En la cortina sureste tenemos aparejos de mampuesto de nueva factura, otros no, donde el matacán está siendo vegetalizado por alguna leñosa o donde la obra en piedra se encuentra cabalgada por listones paralelos de madera demasiado largos, que pretenden “hacer matanza”, lográndolo, pero evidenciando un trabajo de gaviones excesivo que habla de pocos recursos presupuestarios de la obra rehabilitadora base de hace algunos años. Esto queda corroborado en el flanco y la cara del baluarte sur de San Diego, en el revellín sureste y en muy buena parte del revellín mayor noroeste. 



 De la misma forma, los espeques o puntales de escuadra en número de diez, situados en el ángulo flanqueado del baluarte de San Diego, revelan que tal vez no haya una solución de continuidad estructural para aquel punto concreto. Conviene además mencionar el canteado equívoco de algunos cuñales, de piezas en arista que no se encuentran en sus juntas. Continúa la desolidarización en piezas de sillería. Inclusivemente, la obra nueva pierde todo el empaque si la comparamos con la pre-existencia (cara y flanco izquierdos de S. Diego, cortina suroeste y todo el baluarte Oeste de San Juan, por ejemplo).    

(Continuará)

R.P.I.

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