OPINIÓN

BOLITAS DE PLÁSTICO ENVENENAN NUESTROS MARES 

Manuel Vázquez de la Cruz  

 Los reyes en Galicia se adelantaron y, como malos monarcas, nos hicieron la maldad de mandarnos miles y miles de gotas de veneno a las rías que dan trabajo y sustento. Es, amigos, una enorme desgracia que puede, eso sí, demostrar incluso a la derecha que piensa y razona la ineficacia del Gobierno de nuestra tierra porque metida en cuerpo y alma en insultos, ”ETAs inexistentes” y demás matracas cansinas parece que durante días y días no se han enterado ni gobierno ni sus técnicos, de nada de nada. Lo suyo es hacer obras como la entrada al parque de cerca de donde vivo que rompe paisajes y arruina sosiegos. Con un gasto inmenso que se antoja innecesario en esa cuantía. O quizás piensen, como acostumbran en que el Estado (que creen, como Luis XIV, que les pertenece) no debe intervenir en nada y para nada, que a quien Dios se la dé, san Pedro se la bendiga, y si las bolitas nos dejan sin mares, lo mejor es el silencio, y si muchas persoas lo van a sufrir..., pues lo que dijo aquella parlamentaria: ¡Que se jodan!

 Ellos bastante tienen con árboles de Navidad con muchas  lucecitas, cabalgatas enormes con blancos pintados de negro y que los suyos aporreen con odio (¡Dios mío, que caras!) un  muñequito para la ocasión que representa a presidente del Gobierno de su patria, no de la que deseaban tener. ¡Qué país el suyo, qué paisaje ofrecen, qué paisanaje representan, qué pena! Goebbels es su guía, y seguirán mintiendo, llamando a la violencia, y cualquier día podrá pasar algo que nos lleve a todos envueltos en odio como las bolitas de nuestros mares envueltos en sus olas, a un desastre tremendo desastre. 

 ¿Cómo los podemos convencer de que ese no es un buen camino? Creo que el lenguaje está en una papeleta de votar cuando toque hacerlo. Nos lo pide el mar y la convivencia pacífica y democrática de todos los pensares pacíficos. Esas actitudes no deberían representar a nadie, o solo a unos pocos.  

 Yo, cuando toque, votaré porque siempre se piense en el mar, en la tierra, en el agua y en las personas que lo necesiten porque concibo el Estado como una gran familia donde los miembros se ayuden unos a otros. Donde haya mañana en paz. 

 Y sobre todo votaré contra los que solo ofrecen odio, rencor y mentiras, porque cualquier día ese pensamiento puede plasmarse en actitudes de máxima violencia. Pequeña o grande, incluso sólo simbólica. Por el bien absolutamente de todos, es necesario cortar de raíz el mínimo comportamiento que la practique o la predique. Hagámoslo con nuestro voto. 

 Y por si alguien no lo sabia, la coalición vasca Bildu, en sus estatutos hace una condena expresa a la violencia política.  

 Y me gustaría preguntar a algunos y pregunto. 

 Entendiendo que la oposición a través de todos los medios y sobre todo el Parlamento,..., debe ser oposición y gobierno: 

 ¿Pueden ustedes, además de insultos (que empiezan a ser como los gritos de rigor que la Falange donó a la dictadura) hacer algo, aunque solo sea para limpiar el mar de bolitas de plástico? 

 Ya han pasado varios días desde que envenenan nuestros mares.